Playa del Carmen, Q. Roo. — El caso del delfín Mincho, que en 2020 sufrió un fuerte golpe en un espectáculo del Dolphinaris Barceló, derivó en una denuncia penal ante la Fiscalía General de la República (FGR) y la clausura total definitiva del recinto, por múltiples violaciones a la Ley General de Vida Silvestre.
De acuerdo con la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), el delfín participó en acrobacias sin autorización y estando en tratamiento médico, pese a que tenía incapacidad por 15 días. Tan solo dos días después del impacto, fue reincorporado a las actividades, lo que constituye una falta grave.
Además de este hecho, se identificaron otras irregularidades, como:
- No reportar incidentes peligrosos ante las autoridades.
- Falta de evaluaciones médicas obligatorias.
- Sobreexposición al calor por temperatura del agua no regulada.
- Prácticas que contravienen el trato digno y respetuoso establecido en la ley.
Mincho, actualmente de 35 años, se encuentra en otro recinto. Tiene una afección crónica ocular, siendo ciego del ojo izquierdo y conservando solo 60% de visión en el derecho. Ya no participa en espectáculos de alto impacto.
El caso fue tipificado como probable delito conforme al artículo 420 del Código Penal Federal, con sanciones que van de uno a nueve años de prisión y hasta tres mil días de multa.
Profepa reiteró su compromiso por garantizar el bienestar animal, e hizo un llamado a la vigilancia ciudadana para denunciar cualquier irregularidad en el trato a especies en cautiverio como sucedió en el Dolphinaris Barceló.